miércoles, 30 de junio de 2010

Te quiero ver, dentro y fuera de la cancha


Es un tema inevitable, un espectáculo que hizo vibrar a todo Chile al son de un C-H-I, pero que terminó antes de lo que esperábamos, o más bien, de lo que queríamos. Hoy dejaré mi faceta política para escribir de fútbol, una pasión de multitudes y el gran negocio de dirigentes y auspiciadores.


Perdimos, para variar, contra el mejor equipo del mundo, pero ganamos lo que creíamos olvidado: la esperanza, el triunfalismo y la alegría. No podemos sentirnos a menos luego de haber visto a nuestro equipo pasar segundos en las clasificatorias, y llegar a octavos de final jugando de igual a igual ante un poderoso Brasil y una alabada España.


No podemos estar tristes tras haber hecho historia, sacándonos el karma de no poder ganar en un Mundial desde el que jugamos en casa, y lograr que todo el planeta hablara de nosotros y destacara a nuestros jugadores, oriundos de familias humildes y barrios marginados. Tampoco se pueden quejar los vendedores de ropa y chiches deportivos, en especial las grandes multitiendas con sus liquidaciones de bodega y las ferias consumistas de Meiggs y Patronato, llenas de poleras pirateadas y vuvuzelas de los mil demonios.


Chile fue todo fiesta y unidad por dos semanas, dejando de lado colores políticos, creencias religiosas y todo lo que nos separa cuando no hay opio de por medio. Olvidamos incluso, que hace 4 meses un terremoto dejó sin techo y abrigo a miles de personas al centro-sur del país. Y no por llevar al emblema de Chile ayuda a Chile a que se desgastara flameando al viento de Sudáfrica, la situación iba a mejorar para ellos. Digámoslo a quienes vendieron hasta a su madre con tal de sacar pasajes para ver los partidos en vivo, mientras los menos “afortunados” sólo se conformaron con adquirir un plasma de 40 pulgadas para sentirse en el estadio gracias al High Definition. Mi tío es un ejemplo de ello, teniendo 4 teles en su casa, se endeudó con una nueva porque quería impresionar a sus amigos junto a un gran asado mundialero, mientras el 5 de marzo apenas depositó 10 lucas para los daminificados en la cuenta 2702.


Pero terminada la participación de la Roja volvimos a lo de siempre, al estrés y a la pobreza que consume a esta nación en el día a día. Somos pesimistas, estamos ya casi acostumbrados a perder, pero Bielsa nos cambió la mentalidad, nos hizo creer que no había imposibles, y pese la derrota, confiamos en que la Roja podrá llevarse la Copa el 2014, Mundial que tendrá como sede a nuestro eterno verdugo verdeamarelo. Soñad entonces, que soñar es gratuito y libre, y esperad que para entonces nos acompañe algo más de suerte y el camino no se nos venga cuesta arriba, puesto que aquí lo único que faltó es suerte, ya que jugadores con talento demostramos que tenemos.


Lejos de los comentarios burdos de medios extranjeros y el resultado final de los marcadores, Chile jugó sus partidos limpia y profesionalmente, a diferencia de los equipos europeos que se dedicaron sólo a empujar y a fingir caídas al suelo. La Selección no se mereció ni la mitad de las tarjetas que le pusieron, pero ahí ya entra a primar el favoritismo y el protagonismo de los malos árbitros y jueces de línea, que validaron goles inexistentes y anularon los que eran reales.


No obstante, llegará el momento en que rompamos la mala racha, y ojala esté en las manos de este equipo y este DT hacerlo. El Loco es irreemplazable, un técnico de excelencia y que inspira respeto, por lo que si queremos conservarlo, debemos cruzar los dedos porque Piñera suelte los morlacos necesarios, sin caer en la extravagancia. Si, dije Piñera, puesto que como principal accionista del mayor acreedor de la ANFP, es el que finalmente tendrá la última palabra; de algo que sirvan sus conflictos de intereses y su apitutado subsecretario de Deportes…


En lo que queda de Sudáfrica y Waka Waka, espero ver salir a una Alemania campeona, porque por ningún motivo me gustaría ver el trofeo monopolizado en un hexacampeón, ni a los trasandinos vanagloriando aún más a un petiso que mete goles con la mano y se las da de técnico, cuando a Bielsa no le llega ni a los talones (literalmente :P). Pero es sólo un sueño, uno más de tantos que alimentan esta fiebre mundialera, y que acabará el 11 de julio con el pitazo final del árbitro. De regreso a la realidad, afuera de la caja boba hipnotizadora.


Sólo queda esperar que Bielsa sepa valorar el afecto y la confianza que hemos depositado en él, tanto en las buenas como en las malas, sentimientos que no recibió en su natal Argentina, y podamos seguir insistiendo con un ¡viva Chile ctm!, que el 2014 venceremos ;)


martes, 15 de junio de 2010

¿Alguien dijo Progresista?


Las pasadas elecciones presidenciales dejaron algo más que una coalición moribunda y un Gobierno arrogante. Dejaron entrever una herida abierta en el pecho de millones de chilenos hastiados de la ineptitud y la inoperancia de quienes, por más obligación constitucional que democrática, debían gobernar y erigir nuestras pequeñas y exprimidas vidas consumistas. Esa herida se canalizó en primera vuelta con un nombre, Marco Enríquez-Ominami, bajo el cual estaba escrito el nombre de todos y cada uno de los disconformes con el voraz actuar de una Concertación tan derechizadamente neoliberal como su opositora y conservadora Alianza por Chile.


El resultado fueron 1 millón y medio de votos, 20% de los inscritos en el Servel que marcaron por la opción independiente de la lista. Datos numéricos y estadísticos por los que los abanderados presidenciales se pelearon a muerte para sumarlos en segunda vuelta. Pero eran sólo eso, números y porcentajes que hacían falta para alcanzar el anhelado 50+1 con el que al final se impuso un sórdido Sebastián Piñera ante un escueto Eduardo Frei. Nunca esos números fueron individualizados como personas trabajadoras, con familias, necesidades y opiniones personales, opiniones que de nada servían a la hora de ir a la urna el 17 de enero y votar por el blanco o el negro, sin una opción de color distinto.


Un mes después, fuimos golpeados por un devastador terremoto que no hizo más que ratificar la incompetencia de las autoridades salientes y la gran capacidad de las entrantes para aprovecharse de la desgracia y usarla como pantalla para faltar a sus promesas de campaña. Hoy, la herida sangrante parece haber cerrado, pero no por alguna curación efectiva, si no por compresas e inyecciones de morfina, avivadas por pasiones futbolísticas y proyectos usurpados de las mentes progresistas de quienes trabajaron por ese millón y medio de soñadores que querían un país mejor.


Las ideas buenas siempre son bien recibidas, vengan de donde vengan. Hoy el Gobierno tiene un 53% de aprobación por comprometerse a seguir parte del programa de Marco, pero hasta ahora no ha llevado a cabo ninguno de los puntos que tanto repitió el Presidente cuando estaba en campaña. “Esto es progresar”, dicen los ministros aplaudiendo a destajo. “Esto es discriminar”, dice la Concertación mientras reclama por la persecución política en contra de los funcionarios públicos que fueran contratados en estas dos décadas de pitutocracia.


Y es esta misma Concertación la que se hacía llamar progresista, cuando tuvo 20 años a Chile estancado entre tratados de libre comercio en los que se llevan nuestros productos al extranjero para luego volver a importarlos más caros. La misma Concertación que se tapó los oídos cuando estudiantes, profesores, médicos, mapuches, usuarios del Transantiago y pensionados salieron a las calles exigiendo sus derechos. La misma Concertación que daba chipe libre a los delincuentes y narcotraficantes, mientras metía a la cárcel a titulares de Dicom y agricultores de cannabis para autoconsumo. La misma que, entre otras cosas, trató a Marco de inmaduro y que ahora anda llorando porque vuelva y les enseñe a ser Progresistas de verdad.


Esto se llama hipocresía, y eso es lo que como Partido Político vamos a combatir. Tenemos los mismos sueños y anhelos de aquel perceptiblemente lejano 2009, y una altura de miras que ya se la quisieran los viejos dinosaurios de la politiquería chilena. Ser progresista no es sólo presentar unos cuantos proyectos para mantener contento al pueblo, si no trabajar para que cada una de las personas, sin exclusión, vean sus derechos respetados y tengan una mejor calidad de vida.


Ser progresista es buscar la libertad en todas sus formas, desde la libre elección de mercado hasta la libre expresión de pensamientos. Es además buscar la igualdad y justicia para todos, sin distinciones de género, origen étnico ni nivel socioeconómico. Un progresista es un ser fraterno, preocupado por los demás y de su bienestar, por sobre el beneficio propio, comprendiendo que la educación y la salud es un derecho innegable de cada ser humano. Progresismo es ver un país sin fronteras, amigo de nuestros vecinos pero capaz de autosostenerse cuando nos quitan el hombro. Ser progresista es ser tolerante con toda opción personal, desde lo religioso hasta lo sexual, siempre con el respeto y dignidad que todo ciudadano merece. El real progreso sólo se puede ver a largo plazo, conservando y protegiendo nuestro medio ambiente y nuestra rica flora y fauna nativa, especialmente a aquella que forma parte de nuestras familias y que con cariño llamamos "mascotas". Los progresistas vemos nuestro pasado de forma constructiva, aprendiendo de los errores y no enrostrándolos para generar polémica con fines electorales. Un Partido Progresista es aquel que se rige por estas normas en Pro de una sociedad que exige a gritos un verdadero y fructífero cambio.


La herida que tiene el país no está cerrada, muy al contrario, algún día no aguantará la presión y reventará grotescamente, pero estaremos preparados para suturarla a base de ideas concretas y no superficiales, con toda la fuerza y la energía de una juventud que tiene la garra y el coraje para lograr grandes cosas. El Partido Progresista recién se está formando, y todos podemos ayudar a que crezca recto, sano, puro y firme. Es el comienzo de una nueva revolución, impulsada por un eco que se ha hecho sentir en toda América Latina. Yo, una vez más, Marco por el PRO.

sábado, 22 de mayo de 2010

Cuenteo Público 2010


Sólo Sebastián Piñera puede vender la pomada tan bien como lo hizo ayer. Ya dije antes que era poco prudente evaluar su Gobierno a apenas dos meses y medio de haber asumido, pero tras escuchar su discurso tendré que pecar de imprudencia, al igual que él. Vamos allá.


Partió con las típicas palabras ‘reconciliadoras’ de las que pavonea cuando le ponen un micrófono en frente, llamando a la unidad nacional y mencionando a Dios cada vez que necesitaba terminar una frase. Dio las gracias a Bachelet, Lagos, Frei, Alwyn, O’Higgins, Carrera, Rodríguez y cuanto weón se le pasó por la cabeza, antes de ir por fin al grano. Leyó un resumen escolar de lo que pasó el 27 de febrero y de cómo todos ayudamos a paliar la emergencia, como si no fuéramos chilenos y no lo supiéramos. Hizo un minuto de silencio por las víctimas, pero no entregó detalles de las conclusiones que hasta ahora ha sacado la comisión que investiga la descoordinación durante el terremoto, cuestión que interesa a todos los familiares de los difuntos. Pero éste no sería el único tema del que se mantendría al margen.


Tras menospreciar una y otra vez a la Concertación por legados como EFE, Transantiago y Chiledeportes, se vanaglorió de haber mandado más proyectos al Congreso que todos sus predecesores a la fecha, entre los que cuentan el aumento transitorio del royalty minero y el impuesto al tabaco, argumentando que este último es dañino para la salud, más no tomó en cuenta que el alcohol es mucho más dañino ya que no sólo mata a quien conduce ebrio, si no también a quienes manejan responsablemente (eso sin contar la delincuencia y la ruina a la que conlleva su abuso). Pero como las grandes corporaciones mandan, pasada la emergencia, los que ganan más volverán a pagar menos, y el alcohol no se tocará, ya que molestaría a nuestras empresas importadoras.


Después vino un sin fin de promesas de campaña carentes de bases financieras y administrativas, como la disminución gradual del 7% de salud que se le descuenta a los pensionados, la trillada formación de 1 millón de empleos para el 2014, terminar con las listas de espera en el AUGE, reformar la Justicia Civil, dar un bono por bodas de oro, y crear nuevos Ministerios. ¿Cómo y cuánto costarán estos proyectos? No se pierdan la próxima cuenta pública para saberlo...


En educación, prometió que ningún joven con ganas de estudiar no podría hacerlo por falta de dinero, pero no informó sobre un proyecto al respecto. Así mismo, planteó alargar las jornadas de clases en los barrios conflictivos, como si eso fuese a disminuir el narcotráfico o la delincuencia. ¿Qué dirán los injuriados y agredidos profesores al respecto? Además, añadirá al Simce pruebas de Inglés (bien por eso), Tecnología (mal por los que no tienen acceso), y Educación Física (pésimo para todos los holgazanes :P).


Lo que sí queda claro, es que al que le falta estudiar más es al mismo Piñera, pues a parte de insistir en su peculiar hablamiento y referirse al ‘cáncer de mamos’, dijo que pretendía que nuestra economía creciera como hoy lo hace la extinta Checoslovaquia y la casi en bancarrota Portugal (¡qué miedo!).


En fin, todos quedaron contentos con tanto chamulleo, menos los defensores de temas que fueron olvidados durante esa hora y cincuenta minutos de autoalabanza, como es el caso de los animales, el medioambiente, la cultura, el deporte, el conflicto indígena y las minorías sexuales, materias que sacan ronchas a la conservadora y neoliberal Alianza por Chile y a su adorada Iglesia Católica.


¿Mi conclusión final? Piñera sigue pensando que es candidato en lugar de Presidente, por lo que aún necesita un empujón a la realidad y quitarse el disfraz del terremoto tras el cual oculta su inexperiencia en el ámbito social. Un país se levanta con trabajo y oportunidades, no con palabrería y buenos deseos. Así cualquiera.


domingo, 2 de mayo de 2010

Báñense en su Salsa


Otra vez nos vemos afectados, como planeta, a un desastre ecológico por culpa de la ineptitud humana. La plataforma petrolera estadounidense Deepwater, ubicada en el Golfo de México, sufrió un desperfecto y estalló, liberando miles de toneladas diarias de crudo en medio del Océano Atlántico. Ahora, la mancha de petróleo ya alcanza el tamaño de Puerto Rico, y se espera que siga creciendo hasta que los robots que trabajan a un kilómetro y medio de profundidad, puedan reparar la fuga.


Se ha dicho, incesantemente, que el famoso ‘oro negro’ perjudica al medio ambiente, y que debería ser reemplazado a la brevedad por energías limpias, como la eléctrica y la solar, pero las empresas petroleras y automotoras (que son las mismas), se niegan a hacerlo para abaratar costos. No obstante, son accidentes como éste los que terminan costando miles de millones de dólares en procedimientos de reparación y limpieza de aguas, que podrían haber sido usados en investigar otras áreas de la mecánica.


Pero como los simples humanos no tenemos ni voz ni voto (a menos que tengamos plata), los empresarios se siguen tapando los oídos y así veremos contaminarse nuestro mundo con desechos y radioactividad hasta el fin de los tiempos neoliberales. Aún así, hay maneras individuales en que podemos actuar para boicotearlos, y contribuir un poco a proteger la vida y la integridad contra la que ellos atentan:


1.- Lo más obvio, es partir limitando lo que más puedas el uso de combustibles fósiles. Para eso, puedes compartir y turnar tu coche con alguien más que vaya a tu ruta, disminuyendo así no sólo la emisión de gases tóxicos, si no también la congestión vehicular. Ponte de acuerdo con tus amigos o vecinos, y si no conoces a nadie, hay varias webs dedicadas a encontrar pasajeros afines para compartir los viajes, con lo cual además podrías hacer nuevas amistades.


2.- Si no tienes vehículo, usa el transporte público. Sí, sabemos que el Transantiago sigue siendo malo, pero es la única alternativa que tenemos para aliviar la emisión de dióxido de carbono. Válete también de taxi-colectivos y el Metro -bajo tu propio riesgo- xD


3.- Si lo que quieres además es ejercitar tu cuerpo, entonces camina o sal a andar en bici. No hay nada más barato y saludable que usar nuestras piernas para lo que fueron creadas, y prueba de esto es la iniciativa de Donella de poner teclas de piano en los escalones del Metro, para incentivar a la gente a subir los peldaños a la antigua, y no pararse en una escalera mecánica como si fueran inválidos.


4.- Si está a tu alcance, compra o convierte tu auto en híbrido. Gastarás menos en bencina y lo que es mejor, obligarás a las petroleras a cambiar de rubro, y a las automotoras a hacer vehículos compatibles a la demanda del público.


5.- No te servirá para movilizarte, pero si para asegurar un mejor futuro a las próximas generaciones. Planta un árbol, de lo que sea, pero asegúrate que crezca y esté en un lugar seguro donde le dé suficiente luz. Ojalá sea en tu jardín, pero si tu casa no cuenta con uno, busca un área fértil en las inmediaciones de tu ciudad, o visita una reserva forestal donde de seguro estarán encantados de darte un espacio. Si cada humano sembrara al menos un árbol en toda su vida, nos ahorraríamos muchos de los problemas que tenemos hoy día.


Son medidas básicas y algo trilladas, pero sencillas y 100% efectivas. Lo importante es lograr que las empresas petroleras quiebren y dejen de ocurrir hechos tan lamentables como el de Deepwater, que dañan la vida submarina y la de quienes nos valemos de ella.


Recuerda que no sólo el derrame de petróleo causa daño, si no también la quema de sus derivados, desde combustibles hasta pegamentos y plásticos. El humo cargado de CO2 contamina el aire y envenena nuestros pulmones, y por culpa de la deforestación, no alcanza a ser del todo procesado. Son estas cosas las que nos están matando de a poco, acortando nuestras vidas y la de todos los seres vivos. Pero no dejes que te echen la culpa por ello, ya que estás obligado a consumir petróleo para poder mover las máquinas que ellos mismos construyen. No dejes por tanto que te culpen por la contaminación y la falacia del calentamiento global, porque la primera la causan ellos, y la segunda es algo natural que ha pasado desde siempre, debido a las manchas solares.


Combátelos firmemente y déjalos solos bañándose en su propia mugre, porque así como son buenos destruyendo el ecosistema, también son buenos para pedir nuestra ayuda cuando se mandan condoros. Ya se los hemos pedido de todas las formas posibles y nos han ignorado. Ahora debemos tomar cartas en el asunto con urgencia, y darles por donde más les duele: la depreciación de su producto estrella.

La Ley Orsini


Odio referirme a esto, así que la haré corta. Ya se va haciendo costumbre ver personajillos de la farándula rondar por tribunales, por uno u otro motivo estúpido. Los recuerdos más frescos que tengo son a Alejandra Álvarez demandando a Pamela Díaz por haber mostrado públicamente unas fotos porno de la demandante (puaj!), y a Edmundo Varas con su voz de pito exigiendo a los gendarmes que lo soltaran en medio de Tribunales, tras haber sido detenido por agredir a un familiar.


La semana pasada tuvimos varios hechos que fueron portada en todos los diarios, los cuales nos recordaron lo decadente que es nuestra televisión. Claudia Schmidt formalizada por cachetear a una productora; Oscar Garcés investigado por abuso sexual contra una mucama; y, para no ser menos, Maite Orsini y otra weona detenidas por invasión de morada, tras querer jugarle una broma a otro saco wea famoso, escalando su edificio cual ladronas, para entrar a su departamento por el balcón... claro, que las muy idiotas se equivocaron de ventana y la dueña de casa llamó a la policía.


Pero eso no quedó ahí. Ya habiendo sido dejadas en libertad, la chica de Calle 7 demandó a la oficial que la detuvo por supuestamente haberla golpeado durante el arresto, y a los días después apareció con un ojo morado y un cuello ortopédico, cual Kenita Larraín tras haber saltado del auto del Chino Ríos. Ahora, la cabo segundo Carmen Jara, debe enfrentar a la Fiscalía Militar por supuesto abuso de autoridad, sin embargo el mismo día del incidente, la cabo constató las lesiones que le provocó la ‘inocente’ Maite, cosa que no ha podido hacer la bailarina, modelo o no sé que chucha es, ya que obviamente está fingiendo para acaparar más cámaras.


Siento, al igual que muchos, que ya está bueno que cada prostituta que quiera hacerse famosa ande usando a la Justicia como medio, cuando hay miles de causas pendientes de gente que realmente necesita solución a casos de vida o muerte, y por culpa de estas rameras sus audiencias se postergan por meses. Es por esta razón, y para que los famosillos de cuarta dejen de andar lucrando en programas de tv contando sus pelotudeces, que propongo la Ley Orsini, una acta que prohíba la reinserción de personajes públicos a los medios del mismo ámbito, en caso de haber cometido delito alguno. Fácil y equitativo, al igual que a un criminal se le obliga a guardar silencio y no poder acercarse al lugar del crimen, que lo mismo se haga con los famosillos, para dejar de ver su precaria imagen tanto en las pantallas, como en los Juzgados. Dejo la propuesta abierta para que alguien la tome y la modifique, pero ojalá sea llevada al Congreso para que estas mierdas dejen de hacer escándalos porque si. Claro, dudo que alguien que no tenga la genialidad de Nelson Ávila, me vaya a hacer caso :(

martes, 20 de abril de 2010

Anexo Musical N°2: "Crimen Sollicitationis"



Crimen Sollicitationis es una Ley Canónica promulgada en 1962 por el Cardenal italiano Alfredo Ottaviani, en la que se enfatizan las sanciones contra los sacerdotes que propusieran o cometieran abusos sexuales contra los fieles, incluyendo comportamientos homosexuales, pedofílicos y zoofílicos. La prórroga también resalta la culpa que recae sobre los que tienen conocimiento y aún así encubren estos actos, como sería el caso de SS Benedicto XVI. Para todos estos casos, la condena final es la Excomunión.

¿Por qué se ha hecho oídos sordos a este documento católico? Pues eso es lo que Scottland Yard y las policías del mundo están investigando, pero en tanto no se saquen las primeras conclusiones y hayan culpables en esta red de pederastia, les dejo este tema del último disco de Ska-P, titulado igual que la ley ignorada, Crimen Sollicitationis. Disfrútenlo ;)

Vade Retro, 2ª Parte


El Vaticano fue legalmente un estado italiano en 1929, y desde entonces está libre de pagar impuestos y dar cuenta pública de sus actos. Por este motivo, ha llegado a convertirse en el Estado más rico del mundo, financiado por las donaciones de los devotos cristianos, que ingenuamente creen que su dinero va en ayuda de los más necesitados. Pero visto el actuar de la Iglesia desde su formación hasta el decenio actual, sólo nos queda creer que usan sus recursos para mantener sus lujos y financiar el silencio de las autoridades con las que trabajan, ocultando temas tan sensibles como el abuso sexual de menores.


Te bautizan apenas naces, ya que según ellos, te irás al Limbo cuando mueras por no hacerlo, obligándote a seguir una doctrina que no terminas de entender hasta que eres mayor de edad, llegando al final de tus días creyendo que estás en lo correcto con golpearte el pecho e ir a misa todos los fines de semana. Te hacen creer que existe un ser todopoderoso y omnisciente, que está a tu lado para cuidarte y juzgarte si no haces lo que dictan sus Mandamientos, para recompensarte con el Jardín del Edén o castigarte con una eternidad de sufrimiento y agonía en el Infierno.


¿Pero dónde estaba Dios cuando miles de creyentes murieron en manos de tiranos o de desastres naturales? ¿Por qué se ensaña con los pobres y no con los ostentosos empresarios y Jefes de Estado? Ahí es donde aparecen las cientos de sectas derivadas de la Iglesia Católica, que te dan las respuestas más alocadas citando el Fin del Mundo y a la segunda venida de Cristo. Evangélicos gritando y cantando frente a tu casa; mormones gringos que sin saber una pizca de español, se vienen a Latinoamérica engrupidos con un sueldo miserable; Testigos de Jehová que dicen tener al Mesías entre ellos, y que trae la salvación para la humanidad ante el ineludible Apocalipsis y la horda de demonios con cachos y tridentes de fuego. Pura charlatanería barata, pensada para someterte en el miedo y poder estrujarte los bolsillos.


Hermanos, estamos en el siglo XXI. Dos mil años hemos sido apresados, castigados y atormentados por una mafia eclesiástica que basa sus enseñanzas en falacias y plagios de civilizaciones antiguas, las cuales ideaban sus mitos basadas en estudios del comportamiento de los astros y las estaciones del año. La Biblia es eso, un libro de astrología mezclada con literatura fantástica. Vean Zeitgeist 1 si quieren más información.


La Iglesia fue una excusa romana de dominación, y luego se convirtió en la fuerza moral para adoctrinar masas y mantenerlas a raya en todo el mundo. Hoy nos damos cuenta de la crueldad y la manera en que hemos sido usados por estos señores, que de santos no tienen nada, pero que de dictadores y ambiciosos no se sentarán ni en un millón de años a la derecha ni la izquierda del Padre. Si Dios realmente existe, esta es la oportunidad de demostrarlo, permitiendo que se haga justicia por los abusos sexuales que los párrocos ‘acumulados’ por el celibato han cometido contra menores, y que Su Santidad Don Ratzinger calló para postergar el escándalo y el rechazo mundial que finalmente marcará y pondrá fin a su pontificado.


Afortunadamente, la juventud actual no es imbécil -aunque si un poco floja y alocada-, y está disconforme con tantas restricciones impuestas por la curia y la sociedad moderna, por lo que ya está alzando su voz contra el dogmatismo que nos rige y la falta de libertades, especialmente sexuales. Estamos entrando en la era de Acuario, por lo que ya es tiempo de dejar atrás el cinismo de la era Pisciana y abrir nuestras mentes a la realidad y condenar a quienes si son culpables de sus actos. La pedofilia no es propia de los homosexuales como aseveró el Cardenal Bertone, si no es causada por abusos o falencias durante la infancia del que la padece, un verdadero círculo vicioso que sólo se puede detener con terapia y no echándole tierra encima.


No digo que todos los curas sean iguales, porque así como pederastas hay en todos lados, también hay sacerdotes honestos y gentiles, igual que universitarios solidarios y aperrados, y profesionales dedicados de pleno a la labor social. No te metas a una entidad con un historial tan manchado, y busca otras alternativas para poder ayudar a quienes más lo necesitan, que te aseguro existen muchas más y con un buen futuro. No hace falta tomar los Sacramentos para estar con Dios, ya que de existir, sólo te pediría que cumplieras la única enseñanza que Jesús hubiera considerado válida: “ámense los unos a los otros”. No queremos más iglesias opresoras. No más curas violadores. No más opulencia en el Vaticano. Es el momento de que alguien pague por los pecados cometidos en nombre de Jesucristo. Benedicto, sacaste el número premiado.

domingo, 18 de abril de 2010

Vade Retro, 1ª Parte


En su próxima visita a Gran Bretaña en septiembre, el Papa Benedicto XVI podría ser apresado y juzgado por encubrir casos de pederastia en la Iglesia, en tiempos en los que era Cardenal y estaba en sus manos sancionar o exculpar a los curas depravados, no sólo en esa nación, si no también en EEUU. Según él, todos esos perdonazos que hizo fueron por razones humanitarias y por el bien de la Santa Sede y sus feligreses, dando a entender que era más importante para él mantener la imagen “pura” de una institución religiosa, que hacer justicia por la inocencia arrebatada a miles de niños.


Pero no es de extrañar que las máximas autoridades eclesiásticas actúen de esta forma, protegiéndose los traseros unos a otros, mientras abren los traseros de seres indefensos despiadadamente. Ya hemos presenciado a lo largo de la historia como los salvajes sacerdotes romanos ejercían a la fuerza sus doctrinas, desde que eran adoradores de Júpiter hasta ser fervientes seguidores de Cristo. Demos una rápida repasada a sus "crímenes sagrados":


Hasta el año 311, el clero perseguía y crucificaba a los cristianos por la herejía de llamar “Dios” a un ser humano. Sin embargo, ese año el emperador Constantino se aburrió de cazarlos y se unió a ellos, convirtiéndose al cristianismo y ocultando de paso su vida de crímenes y destrucción con falsa misericordia y devoción. En el concilio de Nicea escogió junto a sus sabios cuales serían las escrituras sagradas que aparecerían en la Biblia, y según su conveniencia metió párrafos de mitos paganos, entre ellos leyendas egipcias, griegas y persas, con el único fin de reducir a una todas las religiones, para que fuera más fácil imponer la cultura romana a la hora de expandir su Imperio.


Así, propagó el catolicismo a la fuerza y hasta cedió tierras a los clérigos, para que el Reino de los Cielos fuese también terrenal. Quien se atreviera a poner en duda los dogmas de la nueva Iglesia, era condenado por sacrílego y expropiado de sus bienes, haciendo que la gente tuviera más temor de Dios, que adoración por Él. Poco a poco la Iglesia se fue haciendo más poderosa hasta ser parte plenipotenciaria del Estado, en lo que conocemos como el Sacro Imperio Romano.


El cristianismo se extendió en toda Europa, dejando un rastro de sangre de quienes se oponían a pensar como ellos. Famosas son las quemas de brujas, mujeres librepensadoras que exigían los mismos derechos que los hombres, y que sólo por educarse o tener relaciones fuera del matrimonio, eran asesinadas por herejes. Al mismo tiempo se iniciaron las primeras Cruzadas, que buscaban apropiarse de Tierra Santa antes que judíos y musulmanes. Millones de vidas se perdieron en esas batallas, la mayoría de campesinos y niños que eran enviados a defender a su Dios. El Vaticano, con su política antisemita, logró acumular innumerables riquezas tras saquear las ciudades enemigas, y seguiría haciéndolo por cientos de años.


La Inquisición española no fue menor, y la Iglesia Católica ordenó la matanza de 3 millones de protestantes. Durante la conquista de América, los soldados mataron incas, aztecas y araucanos por montones, destruyendo sus culturas y esclavizándolos para luego quedarse con todos sus tesoros, todo en el afán de la evangelización. En esa época, los grandes científicos también fueron humillados y torturados por dar explicaciones más realistas a los fenómenos naturales, de los cuales sólo se sabía mediante relatos fantásticos de la Santa Biblia. Galileo Galilei fue uno de ellos, quien tuvo que abjurar sólo por sostener el modelo heliocéntrico de Copérnico, en el que la Tierra gira alrededor del Sol. Cabe destacar que desde entonces, la Iglesia sigue sintiéndose con el derecho de decidir qué es o no es ético en el plano científico (clonación, células madre, anticonceptivos, etc.).


Siguió después una serie de matanzas, las más importantes ocurridas en Alemania, donde se llevó a cabo la Guerra de los 30 años, entre protestantes y católicos bajo el alero del Papa. Además de su apoyo en la Guerra Civil Española que permitió los genocidios franquistas, también participó del secuestro y esclavización de niños africanos y australianos durante la conquista de esos continentes, y en la era atómica, la Iglesia una vez más le dio la espalda a los judíos durante el Holocausto, y encima se quedó con todo el oro que Hitler le arrebató a las más de 6 millones de víctimas, una vez finalizada la 2da Guerra Mundial.


Como si no le bastara con todas las riquezas acumuladas, el Vaticano también hizo un desfalco al Banco Ambrosiano, por un total de 1373 millones de dólares ocupados para desestabilizar el régimen comunista en Polonia y financiar los asesinatos de la organización paramilitar argentina “Triple A”. Pero sus andanzas en Sudamérica no terminaron ahí, y en la segunda mitad del siglo XX apoyó la arremetida capitalista en Colombia y las dictaduras en Brasil, Bolivia, Argentina y Chile, además de su oscura relación con el gobierno de Fujimori en el Perú.


Los genocidas católicos han hecho lo que han querido en nombre de Cristo, actuando de la forma contraria a lo que predican, haciéndose tan ricos y poderosos, que el solo cetro de oro del Papa podría venderse para alimentar dos días al mundo entero. Más hipocresía católica mañana, en la segunda parte de este tema…

viernes, 26 de marzo de 2010

Tusunami con Olor a Marepoto


Ya pasadas 3 semanas desde el Cambio de Mando y 4 desde el Acabo de Mundo - que a fin de cuentas es lo mismo -, me preguntaron por qué aún no había analizado la gestión del nuevo Gerente Gral. de Chile y su tropa de Ejecutivos de Yale y Harvard, cosa que debería haber hecho el pasado 11 de marzo como era de esperarse, y la verdad es que tengo mis razones para seguir postergándolo.

En primer lugar, hay que reconocer que Frei tuvo razón: la tierra sí se abrió tras resultar Piñera electo. No sé si el ñato será adivino o brujo, pero ya parte de su profecía se cumplió, y tengo las murallas medianeras para la embarrada. Ahora sólo queda esperar la segunda parte de la predicción, en la que se acaba la protección social y se cae la Luna. ¡Que miedo!

Poniéndonos serios, más allá de las teorías conspirativas que atribuyen este terremoto a una maquinación siniestra de Piñera para poder generar el millón de empleos y tener una excusa para sacar a los milicos a la calle, lo cierto es que el piso se nos movió a todos, incluyéndolo a él, cuyo programa de Gobierno se desplomó cual edificio Alto Río.

Es normal por tanto, que el señor Presidente ande nervioso y acelerado, pronunciando mal las palabras como si fuera el niño Zafrada en plena tarallinata. Pero como el chileno siempre se ríe de la desgracia ajena, este tipo de anécdotas nos mantienen drogados y pegados a Twitter, mientras en las afueras seguimos reparando lo que la furia de la Naturaleza o del HAARP nos botó. Por este motivo, tenemos la cabeza en otro lado y no nos interesa saber lo que hacen los hombrecillos de arriba con el país. Bueno, hay excepciones.

El diputado Gabriel Ascencio pidió a la Contraloría investigar un supuesto conflicto de intereses de Sebastián Piñera y del Subsecretario de Deportes, Gabriel Ruiz-Tagle, debido a las acciones que mantienen en Blanco y Negro, además de algunas irregularidades con Chiledeportes. El periodista de Canal 13, Daniel Matamala, fue más punzante todavía y denunció en su programa Chile Debate la violación a la Ley de Probidad que estarían cometiendo varias nuevas autoridades, desde gobernadores hasta ministros, al estar vinculados con empresas a las que deben fiscalizar. Y además, el presidente del PS, Fulvio Rossi, delató la evasión tributaria que habría cometido Piñera en la venta de sus acciones de LAN al grupo Bethia. Verdaderas barbaridades que no se comparan al sufrimiento de la gente afectada por el tsunami, ¿no es así?

En este punto concuerdo con MEO en una entrevistada dada a Las Últimas Noticias: “Parece como que algunos se durmieron en noviembre y despertaron en marzo. No se han dado cuenta de que hubo un terremoto y de otras cosas, como que después de 52 años ganó la Derecha y con eso algo les quiso decir la gente en las elecciones”. Pues Ascencio, Matamala y Rossi son algunos de ellos, que lejos de ir a ayudar a quienes lo perdieron todo, siguen insistiendo en la mala onda y en buscarle la quinta pata al burro (cuidado, que la pueden encontrar). Es verdad que estos hechos deben ser investigados y reprochados, pero hay tiempo y tiempo para cada cosa.

Hoy nos debemos preocupar de poner en pie a nuestro país, y no andar dificultando este proceso poniéndole trabas al nuevo Gobierno. No soy partidario de Piñera, y eso lo saben bien quienes han leído mis notas anteriores, pero sí soy partidario del Pueblo Chileno, mi gente, mis hermanos, que necesitan de toda la atención de los medios y de las autoridades. Si quieren meterse en líos judiciales, mejor busquen a los responsables de la NO alerta de maremoto, que terminó con la vida de cientos de personas. Sea Carmen Fernández, Mariano Rojas o Michelle Bachelet, alguien debe ser condenado por el delito de homicidio aquí cometido, un Parricidio Nacional que sólo puede ser revertido con la colaboración de cada uno de nosotros, para que los damnificados puedan respirar tranquilos y retomar la vida que llevaban antes del sismo. Hasta que eso no pase, dejaré al Gobierno tranquilo. Pero si Piñera lo hace mal, pronto lo tendré en el banquillo de los acusados, ubicado en lo más oscuro de mi blog.

miércoles, 10 de marzo de 2010

Como un Fénix


En los días post terremoto, recuerdo como indignados reclamábamos en mi ciudad la falta de agua y de energía eléctrica. Las pilas escaseaban, así que las noches se iluminaban a la luz de improvisadas fogatas callejeras. No habían supermercados abiertos, y sólo podíamos comer pequeñas rodajas de pan amasado. Andábamos hediondos sin poder bañarnos, y la batería de los colapsados celulares se estaba agotando. Fueron 3 días sin agua y 4 sin luz, para ser exacto, y 5 días sin conexión a Internet. Inaceptable para un país que se hace llamar desarrollado, pensábamos, pero ahora, arrepentidos y avergonzados, bajamos la cabeza ante la realidad vivida por miles de compatriotas, que hasta el día de hoy siguen sin poseer los servicios básicos.


Es por esta razón, y cobijados en la calidez de nuestras sacudidas pero erguidas casas, que nos entra el bichito solidario que tanto creemos nos caracteriza, y metemos nuestras manos en los bolsillos para dar hasta que duela. Siempre y cuando, Don Francisco nos lo pida.


Esa es nuestra precaria realidad, la que nos hace gritar con orgullo que somos los campeones mundiales de la solidaridad, mientras gerentes de megaempresas suben al escenario a hacer algo de marketing disfrazado de compasión. Pero la consigna resulta, y conmovidos vemos a dos mandatarios de ideologías distintas abrazarse por haber superado la meta y haberse así ahorrado 30 mil palos del presupuesto fiscal. Todo un hito, y felices se lo refregamos en la cara a los países que no nos quisieron ayudar. Pero ojo, tampoco somos soberbios: esto lo hacemos sólo una vez al año.


Ese es el Chile actual, ese que cree que basta con mandar un saco de arroz y unas pilchas para que una familia viva por siempre abrigada y satisfecha; que cree que una mediagua puede reemplazar la dignidad de una vivienda construida con años de esfuerzo; ese que cree que el dolor de una pérdida, se supera con algo de lástima y misericordia.


No basta, compañeros, con enviar ayuda cuando alguien frente a una cámara de televisión nos instiga. No basta con proporcionar un plato de comida, cuando quien lo recibe debe alimentarse toda una vida, y no tiene una fuente laboral para hacerlo. No basta con levantar cuatro paredes de madera reciclada, cuando hacen falta muebles y electrodomésticos con qué llenarlas.


Tenemos compatriotas sufriendo lo indecible, sin baños y sin un techo donde dormir, atormentados por un planeta que no deja de remecerse y enrostrarles sin descanso el drama vivido hace poco. Niños que creen jugar al campamento, ignorando su condena a vivir dentro de una carpa por quien sabe cuantos meses más. Gente que lo perdió todo, y que ante la frustración y la catástrofe actuaron si pensar, y en respuesta les mandamos soldados con metralletas a apaciguar.


Debemos ser consecuentes con nosotros mismos, y fuera de agradecer que tenemos aún lo que otros perdieron, dejar de reclamar por vanalidades e ir a ayudar sin esperar que otro lo haga primero. Porque este país es fuerte, porque hemos renacido una y otra vez de nuestras cenizas, y nadie nunca nos ha visto flaquear. Porque la única consigna que debiera seguir latente es esa que se propagara durante la Guerra del Pacífico, esa que con verdadero orgullo nos recuerda que un chileno nunca se rinde, y que lejos de ser solidarios, somos hermanos nacidos de la misma Patria, y que debemos olvidar nuestras diferencias para apoyarnos cuando hace falta. El dolor de nuestro pueblo no termina cuando termina la Teletón; la reconstrucción de Chile recién comienza.